Revista de Bajos

Kinga Glyk entrevista en español

Kínga Glyk es uno de los nuevos valores del bajo eléctrico, prueba de ello es la respuesta que obtienen sus videos en algunas plataformas de difusión, pero es una artista que va más allá de ello a pesar de corta edad.

Tres álbumes como líder con solo 25 años y giras internacionales avalan a quien ya se ha calificado como la esperanza del jazz europeo. Veamos que nos cuenta en exclusiva para Bajos y Bajistas.

 

Hola Kinga, gracias por tu tiempo… ¿Cómo llegó el bajo a tu vida? ¿Qué recuerdas de tus primeros días de aprendizaje?

¡Muchas gracias por invitarme!. Siempre fue mi sueño tocar el bajo. Aparentemente, cuando era una niña, solía pararme en la sala de estar y fingir que tocaba el bajo. Mi papá es músico y me ayudó a conseguir mi primer bajo.

Recuerdo que desde el principio me gustaba desafiarme a mí misma aprendiendo líneas de bajo de oído e improvisando. El tema “Donna Lee” era uno de los que quería aprender cuando empezaba.

Cuéntanos tres discos que hayan sido significativos para ti por alguna razón…

El primero que aparece en mi mente es: Victor Bailey – Low Blow. Muchas canciones de este álbum me han dejado una fuerte impresión. Oz Noy – Ozone Squeeze y el tercero diría, Joe Zawinul – Soulmates. Descubrí este recientemente.

 

Kinga Glyk en vivo

¿Cómo te definirías como bajista?

Me gusta aprender y escuchar cómo la gente compone música. Somos tan diferentes y, a veces, muy similares en la forma en que expresaríamos las emociones en la música.

Me parece importante ser curiosa y abierta a explorar cosas nuevas. Lo que ayuda es centrarse en el verdadero significado y tratar de ver las cosas desde una perspectiva más amplia.

¿Qué importancia tienen las redes sociales en tu carrera?

Siento que las redes sociales a veces van en la dirección equivocada y no las estamos usando de la mejor manera, pero también quiero admitir que esta es una de las herramientas más poderosas que tenemos para llegar a las personas.

Lo que me asusta es que la música, las buenas ideas, las composiciones, los grandes proyectos con un significado profundo a veces parecen perderse o no encajan en un contexto de 15 segundos.

Es como una pelea sobre quien reunirá más seguidores sin importar que herramientas usemos. Me siento muy confundida y perdida sobre qué publicar y compartir virtualmente. Al mismo tiempo veo como “pierdo” mi audiencia cuando no estoy activa por ahí.

Tema muy complicado, pero estoy muy impresionada con el poder de las redes sociales y lo rápido que podemos compartir todo lo que queramos en todo el mundo. Tenemos suerte de tener esa posibilidad.

Cuando tienes que abordar un solo, ¿qué tienes en mente… los cambios, la melodía, desarrollar un motivo o algo más?

En mi opinión, improvisar es una de las cosas más difíciles de hacer bien. No solo es un desafío poder tocar ‘alrededor’ de los cambios. Una debe pensar ante todo en el tema de la canción y abrazarlo durante el solo.

Me gusta mucho centrarme en el ritmo y la melodía, pero también es importante encontrar un equilibrio entre las notas que tocamos y el silencio.

Creo que es difícil salir de la montaña rusa de notas en las que estamos a menudo. Podría compararlo con una mala conversación cuando alguien está diciendo mucha información al azar, tratando de llamar nuestra atención de una manera molesta.

Ok, siento que es un gran desafío para mí ser inteligente a la hora de tocar un solo. Trato de no abrumar al oyente con la cantidad de notas porque entonces no tenemos tiempo para ‘digerir’ lo que recibimos.

 

Kinga Glyk con su Jazz Bass

Mentalmente, ¿tienes un enfoque diferente cuando eres sideman que cuando es líder?

Diría que quiero estar lo más involucrada posible sin importar si lidero o no. Sin duda, es más exigente estar al frente y guiar toda la actuación, pero siento que mi papel puede cambiar muchas veces durante un espectáculo.

Mi tarea principal es unir todo y seguir buscando lo que la música necesita de mí en este momento. La cantidad de compromiso que quiero dar en ambas situaciones es la misma.

Tu último álbum «Feelings» es de 2019, ¿estás trabajando en nuevo material?

Estoy muy emocionada de decir que mi próximo álbum está en proceso de mezcla. Tuve el gran privilegio de grabar esta música con músicos increíbles y me siento agradecida de tener al increíble productor Michael League a mi lado, que me ayudó a armarlo todo.

No puedo esperar para compartir la música con todos. Espero que algunas melodías traigan alegría a la vida de las personas.

¿Cuál es tu bajo favorito actualmente? ¿Vintage o boutique?

Desde mis comienzos hasta ahora utilizo principalmente un bajo Fender Jazz Bass fabricado en Japón en 2009. Siento que este instrumento me ayuda a expresarme. También tengo un Greco EB 3 y estoy muy contenta de haberlo comprado hace mucho tiempo. Aprecio este instrumento cada vez más: el sonido es claro, suave y bastante definido, por lo que incluso en una habitación ruidosa, este bajo hace un buen trabajo.

Si miro ahora tu pedalera, ¿qué encontraré?

He estado usando el Kemper Stage durante algunos años. Es un dispositivo que me permite crear diferentes efectos y preparar sonidos separados para cada canción.

 

Kinga Glyk

¿Qué amplificación estás usando en vivo?

Estoy usando in-ears porque me ayuda a escuchar con mayor precisión lo que está sucediendo musicalmente, especialmente cuando el lugar no es el más fácil de tocar.

No necesito ningún amplificador por ahora, en lugar de tener un gran combo detrás de mi, encontré una herramienta muy útil llamada BackBeat, que me permite disfrutar plenamente tocando el bajo.

Cuando toco las cuerdas lo siento en mi espalda. Se conecta a tu correa y puedes ajustar cuánto quieres sentir las vibraciones de las cuerdas.

¿Cuáles son sus planes a corto plazo?

Es divertido que tuvieras que hacerme la pregunta para darme cuenta de que principalmente tengo muchos más planes a largo plazo.

Soy bastante espontánea cuando se trata de la vida cotidiana, pero tengo muchas ambiciones. Si realmente quieres saber a corto plazo: comprar líquido para lavar platos por la mañana y arreglar los azulejos del baño.

¿Cómo es un día para ti cuando no estás trabajando? ¿Qué te gusta hacer?

Me apasiona mucho cocinar y limpiar jajaja. La mayoría de los días paso mucho tiempo en la cocina, probando recetas e improvisando. También me encanta el voleibol y el tenis de mesa, aunque no tengo muchas oportunidades para jugar.

Pasar tiempo con amigos y familiares es muy importante para mí, pero puedo disfrutar más de todo esto si siento que tengo un buen equilibrio entre trabajo y descanso. Disfruto mucho aprendiendo cosas nuevas y tengo curiosidad por mejorar lo que hago.

Cuando tengo tiempo para estar en casa y no estoy de viaje, normalmente me levanto, tomo té (me encanta el té) a veces desayuno y últimamente trato de tener un plan más concreto de lo que voy a practicar y aprender.

Me gusta seguir la estructura de 20 minutos de trabajo y un breve descanso (alrededor de 10 minutos). Esto me ayuda a estar 100% enfocada en las tareas que realizo y siento que soy más eficiente y productiva durante el día.

Antes solía tocar el bajo todo el día y no es necesariamente la mejor manera de hacerlo. Me doy cuenta de que cuando le doy a mi cerebro demasiado tiempo para dedicarlo a un tema, puede que se vuelva perezoso…

Especialmente cuando paso más tiempo en casa, me gusta sentirme motivada incluso con un cronómetro y tener un buen ritmo de trabajo porque es no es fácil ser estricta cuando no deberías serlo.

Si no hay plazos, tengo que marcarme metas por mi cuenta, es un gran desafío que, a menudo, no resulta sencillo.

 

Kinga Glyk en directo

Ping pong (En una palabra)

● Una ciudad: Lyon

● Un libro: “El sonido de la vida belleza inefable” de Martin Schleske

● Una película: El rey Ricardo

● Comida favorita: Pierogi – albóndigas polacas

● Bebida favorita: té

● Un bajo: Fender Jazz Bass

● Un álbum: Soulmates

● Un concierto: Patricia Kopatchinskaja

● Un héroe: mis padres

 

José Manuel López

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